¿Qué es la Tribulación?
La Tribulación (o Gran Tribulación) es un término común que se refiere a un período de 7 años de tumulto y caos alrededor del mundo antes del regreso de Jesucristo. Este período se menciona en Daniel 9:27, y comienza con un líder global —quien muchos creen que es el Anticristo— firmando un tratado de paz con muchas naciones que durará 7 años. Este período también se divide en dos partes. Este líder romperá el tratado después de 3 años y medio, y esto llevará al mundo entero a la segunda mitad de los 7 años, la cual será mucho peor que la primera mitad.
¿Qué es el rapto?
Aunque la palabra “rapto” no aparece en las versiones en inglés de la Biblia, la palabra griega que se usa para referirse a este evento es harpazzo. Esta palabra se refiere a un arrebato repentino o a ser “arrebatado”. Es este evento el que se menciona en 1 Tesalonicenses 4:17:
“Después nosotros, los que estemos vivos y hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire. Y así estaremos siempre con el Señor.”
La Iglesia se ha dividido en varias líneas ideológicas, incluyendo si el rapto realmente ocurre y, si ocurre, ¿cuándo sucede? Algunos creen que es antes de los 7 años (pretribulacional). Otros creen que ocurre en algún punto a la mitad de los 7 años, y otros creen que la Iglesia pasa por los 7 años completos y es llevada solo después de que hayan transcurrido.
Para mí, no es lo más importante, aunque tengo mis propias opiniones y creencias sobre estos eventos. Lo importante es que quiero preparar a la Iglesia. Como dice el dicho: es mejor no necesitar algo en una emergencia y estar equivocado, que tener razón y estar poco preparado o completamente desprevenido.
Si ya estás leyendo esto, y has llegado hasta aquí, sabes que tú también has sentido que ves las señales por todas partes. Jesús dijo que nadie conoce el día ni la hora de Su regreso, pero también dijo que vigilemos las señales de la temporada de Su venida. Dijo que estemos atentos, no sea que seamos sorprendidos desprevenidos, como las vírgenes insensatas en la parábola. Y las señales de la temporada están por todas partes, y la venida de nuestro Señor será repentina, como un ladrón en la noche.
He incluido aquí una serie de documentos. Uno es una carta para escribir a los seres queridos que se queden atrás. Otros dos documentos tratan acerca de un evento llamado los 3 días de oscuridad y un engaño global que se acerca. Muchos otros han hablado sobre estos eventos, y Dios le ha dado visiones a muchas personas acerca de estas cosas.
No dejaré a mis hermanos y hermanas ciegos a lo que viene sobre este mundo. Yo también he tenido visiones y sueños de las cosas que pronto vendrán. Dios está derramando Su Espíritu sobre toda carne en estos últimos días, tal como dice Hechos. Los jóvenes están soñando sueños. Los ancianos están viendo visiones de lo que vendrá.
Estos documentos están aquí para preparar a la gente “por si acaso”, en obediencia al Señor Jesús. Piénsalos como un botiquín de primeros auxilios o un chaleco salvavidas. Esperas nunca necesitar un botiquín, pero te alegra tenerlo cuando algo ocurre.
Lo más importante, por encima de todo, es desarrollar tu propia relación con Jesucristo y aprender a probar los espíritus, como dice la Biblia. El Espíritu Santo te ayudará si se lo pides. Somos preparadores espirituales. Preparar físicamente todo tipo de cosas sin prepararse primero espiritualmente es una necedad. Las élites del mundo también se están preparando, construyendo búnkeres y muchas otras cosas. Pero solo una relación con Cristo y escuchar claramente Su voz te llevará a través de lo que pronto vendrá.
Si has leído hasta aquí, gracias y que Dios te bendiga. Proclamo la bendición de Dios sobre ti. Que las bendiciones y la protección del Salmo 91, el Salmo 23 y el Salmo 54 estén sobre ti. Te dejo con Hebreos 12:1-3:
“Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos enreda, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de Él sufrió la cruz, menospreciando la vergüenza, y se sentó a la diestra del trono de Dios. Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar.”